Sinónimo de gol. Fernando Llorente está empezando a labrarse un nombre entre los mejores delanteros de la historia más reciente del Athletic. A sus 23 años, este jueves cumplirá los 24, presenta unos números dignos ya de un gran 'nueve'. Y va a más. Si la pasada temporada fue capaz de lograr un promedio de una diana cada dos partidos en la segunda parte del campeonato liguero (nueve en los últimos 18 encuentros), en la presente ha mantenido ese promedio en los 22 choques que acumula en el torneo de la regularidad gracias a sus once tantos. Un bagaje que ha mejorado ostensiblemente gracias a sus últimos trece compromisos de Liga, en los que ha firmado diez de esos goles para alcanzar un sensacional promedio de 0'77 por partido.
En la presente edición de la Liga, a los dos tantos del Calderón hay que sumarle otro frente al Valencia, cuando asumió la responsabilidad de lanzar un penalti con 2-2 en el marcador en el minuto noventa, y otro ante el Málaga en otra vibrante remontada presenciada en San Mamés. Se quedó en blanco en Valladolid, aunque lanzó un penalti que acabó en gol gracias a Pablo Orbaiztras pegar en el palo el lanzamiento del 'nueve' desde los once metros. Y el pasado domingo, en el Coliseum Alfonso Pérez, demostró una vez más su liderazgo dentro del equipo al firmar el tanto del empate, ser objeto de un penalti (el quinto que le pitan esta temporada) que posteriormente fue desperdiciado por Iraola y fallar una clara ocasión que podía haber supuesto la victoria sobre el Getafe.
Su última diana, en cualquier caso, le ha permitido igualar ya el total de tantos logrados a lo largo de la pasada Liga (11).
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